Los agentes físicos son un conjunto de técnicas que se complementan con los ejercicios y biofeedback para intervenir en el cuerpo con fines terapeúticos.
Existen distintos tipos según su naturaleza y efectos. Los más conocidos son los agentes térmicos como el frío o el calor. La termoterapia y en específico el calor puede ser aplicado para tener un efecto superficial o profundo en los tejidos según el tipo y dosis de energía utilizada como la radiofrecuencia (linkear a la técnica específica)  También hay agentes atérmicos como la electroterapia y energía fotoluminica por ejemplo la Luz Led (linkear a la técnica específica) o energía mecánica como el ultrasonido terapéutico.
Cada una de estas técnicas tiene diferentes aplicaciones y efectos terapéuticos ayudando al kinesiólogo tratante al manejo del dolor, inflamación, fortalecimiento o relajación muscular, regeneración de tejidos, entre otros.